Obras son amores…

Los hombres pasan, los recuerdos quedan, como quedan las obras de los que algo hacen.
Victor Montenegro

Obras son amores, que no buenas razones, reza un viejo refrán popular refiriéndose a que es preferible dar respuesta a las demandas o necesidades de la gente con hechos mas que con meras palabras que luego no se cumplen.

En efecto, de nada sirve la palabrería hueca, llena de falsas promesas, si no se llega a la acción que dé las respuestas que la gente espera.

Lo hemos visto en el pasado reciente en Sinaloa cuando el entonces candidato prometió mucho y poco hizo que no fuera para beneficio de sus cuates y compromisos y no para la ciudadanía, para salir al final que las promesas no cumplidas las hizo para ganar la elección.

Vulgo decir que engañó para que la ciudadanía le diera el voto que lo llevó a él y sus compinches a la gubernatura.

Y no es remoto, sinceramente ojalá que nos equivoquemos, que lo mismo suceda con el próximo Presidente de México que prometió demasiado y se antoja muy difícil que pueda cumplirlo, no por desinterés sino por la situación que vive el país tanto en lo económico, como por la densidad de la corrupción y la violencia desatada por el crimen organizado.

Viene el tema original a colación por la forma en que el Gobernador Quirino Ordaz Coppel ha venido trabajando en la ejecución de obras de mucha importancia para la ciudadanía sinaloense.

Ya en una entrega anterior habíamos comentado como el gobernante está atendiendo a todos los municipios, sin discriminación alguna, llevando obras de beneficio colectivo y no para unos cuantos favorecidos, como sucedía en el pasado no remoto.

Este miércoles regresó al norte del Estado para dar el banderazo de inicio para un nuevo colector pluvial que vendrá a resolver el problema de inundaciones no solo al transitado crucero de Leyva y Centenario, sino a colonias localizadas en la zona sur poniente de Los Mochis en una superficie de 240 hectáreas.

Ese nuevo colector que beneficiará a mas de 20 mil habitantes, requerirá de una inversión de 28 millones de pesos, cifra con la que casi se llega a los mil millones de pesos invertidos en obras de drenaje en Sinaloa.

Ya el año pasado se construyó el colector Heriberto Valdez que ha solucionado el problema de inundaciones que con cualquier lluvia ligera afectaban a un amplio sector de la ciudad.

Bien lo señaló Juan Ernesto Millán Pietsch, que se estrena como Director de la CEAPAS, que a este tipo de obras le rehúyen muchos gobernantes porque quedan enterradas y prefieren las obras que estén a la vista para que se les recuerde como su ejecutor.

En efecto, como me decía en una ocasión el entonces Alcalde de Ahome que llegaría a Gobernador de Sinaloa, Alfonso G. Calderón, estas obras (drenaje) no se ven, quedan enterradas y nadie se acuerda del gobierno que las hizo ni cuando sienten los beneficios.

A este tipo de obras, mas que nada se les puede aplicar el refrán a que me refiero al inicio de este espacio: “obras son amores, que no buenas razones…”

Pero no es solo el drenaje, son muchas mas las obras diversas que se han ejecutado y se están realizando en la administración de Ordaz Coppel.

Por acá en el Municipio de Ahome tenemos la pavimentación con concreto hidráulico de la carretera a Topolobampo, que por cierto el Miércoles Ordaz
Coppel abrió un nuevo tramo a los usuarios.

Ese mismo día, acompañado del Alcalde Manuel Urquijo y del Secretario de Salud Dr. Efrén Encinas Torres, inauguró el nuevo Centro de Salud comunitario de Las Grullas Margen Derecha.

Esto por lo que se refiere a la gira de ese miércoles, pero es larga de enumerar la lista de obras emprendidas y realizadas por la administración de Ordaz Coppel, no solo en el municipio de Ahome, sino en todos y cada uno de los municipios sinaloenses.

No hay uno que se queje de abandono u olvido de parte del gobernante.

En estas circunstancias, Quirino se prepara para, en unos meses mas, entrar en la segunda parte de su gobierno, pero ahora con un régimen federal y con una mayoría en el Congreso opuestos al partido de donde proviene el gobernante.

Sin embargo, hay confianza en que el nuevo gobierno federal y los Congresos actúen con congruencia y respeto al federalismo y la división de poderes.

Esto, en el caso de Sinaloa por el bien de nuestro Estado y en el resto por el bien de México.

Esperemos.