Confusión doctoral…!
Este es el precio de ser mal comprendido, pensó. Te llaman diablo o te llaman dios.
Richard Bach
No acostumbro a responder ataques ni insultos, pero por esta ocasión, ante las muchas llamadas y mensajes recibidos haré una excepción.
Siempre he respetado las opiniones de los demás aunque no esté de acuerdo con ellas, menos me he dirigido a quienes difieren de las mías con ofensas.
Al Dr. en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid, Ernesto Hernández Norzagaray, lo he respetado desde que lo conozco hace ya más de tres décadas. Lo he considerado mi amigo.
De ahí que me sorprenda que, dejándose llevar por la fobia hacia Héctor Melesio Cuen me ubique entre “los no pocos comunicadores que han sucumbido a la tentación”.
Si el doctorado en Ciencias Políticas y Sociología se diera tiempo y paciencia para leer mis artículos se daría cuenta que he escrito otros analizando la situación y posicionamiento de otros partidos políticos como el PRI y el PAN.
En esta ocasión le tocó el turno al PAS que tanto les indigesta a él y otros ex trabajadores de la UAS a los que siendo Rector Cuen les cortó las prebendas que venían disfrutando.
Mi artículo habla sobre el posicionamiento que en estos momentos tiene ese nuevo partido que solamente los obnubilados por sus rencores contra el ex Rector de la UAS no quieren ver y se concretan a buscarle lados oscuros.
Que el PAS utilice a estudiantes y maestros de la UAS para sus jornadas de servicio social, de atención a los marginados, es otro tema que ya lo han abordado él y otros ex uaseños.
Mi artículo, en efecto se refiere a una mínima parte de la estadística pasista pero la referencia se centra en la atención que las brigadas del PAS prestan a cientos, miles de familias que viven en zonas marginadas.
Y lo hacen permanentemente.
El cómo es otro tema que ya hace tiempo abordamos en uno de mis artículos.
Otros partidos y políticos lo hacen esporádicamente, salvo honrosas excepciones como los diputados priistas Fernanda Rivera Romo y Marco Antonio Osuna Moreno que tienen tiempo en gestoría permanente.
Esos otros partidos solamente hacen o simulan hacer campañas en épocas pre o electorales.
Al PAS, insisto, le reconozco ese trabajo permanente que lo ha llevado al posicionamiento que hoy tiene ante la ciudadanía.
Y NO ES PROPAGANDA pagada como su óptica lo quiere ver Dr. Hernández Norzagaray.
Es una realidad que no la ven los que no quieren verla y los que tienen un resentimiento que raya en el odio hacia el Maestro Cuen.
Usted me conoce Dr. Hernández Norzagaray. Conoce mi trayectoria que jamás ha variado.
Mi criterio y mi pluma no están a la venta.
Escribo porque me gusta y me publican quienes quieren hacerlo, que modestia aparte, no son pocos.
No he sucumbido a la tentación.
Escribo si, para Proyecto 3 como para unas veinte publicaciones impresas y electrónicas.
En el caso de Proyecto 3 acepté la invitación con la condición de que escribiría sobre los temas que yo desee y sin cortapisas ni censura.
Condición que fue aceptada.
No soy doctorado ni tengo maestrías. Mi bagaje cultural reconozco que no es tan amplio como el suyo, pero creo que también cuenta.
Pero es producto de 59 años de ejercicio periodístico, trayecto en el que he forjado muchas amistades y una que otra enemistad que no me preocupa.
Conozco la política de cerca y también a los políticos.
Pero jamás he sucumbido ante el poder para poner a su disposición mi criterio, que es el único que guía mi pluma.
Discúlpeme por utilizar términos o “recursos del viejo periodismo”. A mucho orgullo de ahí vengo.
Que quiere, me forjé en la brega diaria no en la Complutense.
Como escribió el poeta Salvador Díaz Mirón: “Hay plumajes que cruzan el pantano y no se manchan… ¡Mi plumaje es de esos!”
En efecto, Dr. Hernández Norzagaray, ¡Mi plumaje si es de esos…!