Apertura o simulación…?
Todos piensan en cambiar el mundo, pero nadie piensa en cambiarse a sí mismo. Alexei Tolstoi
A lo largo de su historia de 88 años a partir de su fundación como Partido Nacional Revolucionario el actual PRI ha registrado varios cambios, no solo de nombre sino en sus declaraciones de principios y estatutos, obligado ya por las circunstancias vigentes en su momento o las intenciones presidenciales que al final de cuentas son las que deciden.
Hoy, acabamos de ver un nuevo cambio con algunas modificaciones en sus estatutos, destacando la desaparición de los candados para abrir la puerta a ciudadanos no militantes para ser postulados como candidatos, desde las alcaldías hasta la misma Presidencia de la República.
La XXII Asamblea Nacional aprobó que tanto los priistas como simpatizantes no afiliados puedan contender para convertirse en candidatos.
Se liberan pues los candados que impedían el acceso de no militantes a sus candidaturas rompiendo el monopolio que los priistas mantenían en esas nominaciones.
Pero para encubrir o medio encubrir que ese cambio tiene destinatario, la asamblea priista añade a sus estatutos que el 30% de las candidaturas sean para jóvenes y el 10% para indígenas.
Va también un nuevo Código de ética partidaria que mucha falta le hace al tricolor, así como a otros partidos, ya que la ética al parecer es un tema que desconocen.
Algo muy importante en la modificación estatutaria priista es que los Senadores, Diputados federales y locales plurinominales ya no podrán ser postulados en la elección consecutiva para el mismo cargo y por la misma vía, es decir para ellos no habrá reelección a la que si podrían acceder los electos constitucionalmente por mayoría.
Y también un nuevo precepto estatutario es que los funcionarios electos del tricolor se obligarán a informar de sus actos a los Consejos Políticos nacional y estatales quienes podrán revisar y opinar sobre su desempeño. Es decir estarán obligados a rendir cuentas, pero a su partido.
Ahora bien, a esos funcionarios no les asusta este último asunto. Si los gobernadores y alcaldes no rinden cuentas claras a sus electores y sus congresos, presentan cuentas mochas pero luego se las limpian en los Congresos, ¿les intimidará rendir cuentas a su partido?
Por lo que se refiere a la no reelección por la vía pluri de senadores y diputados las cosas seguirán como están. No se reelegirán consecutivamente en la misma cámara pero son expertos en el chapulineo así que seguirán brincando de un puesto a otro por la misma vía.
Ahí están el vaquetón de Romero Deschamps, Joel Ayala, Daniel Amador, Emilio Gamboa, Manuel Bartlett, etc., etc. Que brincan de una Cámara a otra siempre por la vía plurinominal.
En cuanto los diputados locales, pues de sus Cámaras pueden irse cómodamente a regidurías pluris.
En cuanto al Código de Ética Partidaria será lo mismo que la Comisión de Justicia Partidaria que cuando le cae un caso rara vez sanciona. Se tapan con la misma cobija, pues.
Destinar el 30% de las candidaturas a jóvenes y el 10% a indígenas es positivo pero no cayó nada bien a los dinosáuricos tiburones priistas que verán reducir sus posibilidades de nuevas candidaturas.
La liberación del candado para permitir el acceso a candidaturas a no militantes coloca al PRI en una posición mas actual y democrática, como lo han hecho ya otros partidos.
Esto no fue del agrado de los dinosaurios priistas que ven acotadas sus posibilidades de seguir acaparando puestos en cada elección.
Hubo brincos, gritos y advertencias antes de la asamblea pero a la hora de la verdad todo mundo callado y aplaudiendo.
Claro, en vísperas de la asamblea el Presidente Peña Nieto reunió a los ex presidentes del CEN tricolor y otros connotados priistas.
Y todos contentos, por fuera pero muchos rumiando por dentro.
Se ha dicho que la eliminación de ese candado es un traje a la medida de José Antonio Meade.
Puede ser porque lo coloca en la puerta de la candidatura, sin embargo…
No obstante que desde nuestro particular punto de vista, en estos momentos Meade es el mas completo, sin taches, todo puede suceder.
Los cambios del PRI, su modernización no convencen plenamente.
Ya ha tenido otros cambios y no pasa nada.
Todo sigue igual.
Así será?
Ya veremos si no es más simulación.