David Copperfield sinaloense…?
No basta decir solamente la verdad, mas conviene mostrar la causa de la falsedad. Aristóteles
Conocida a medias la verdad de los excesos y la corrupción del sexenio de Mario López Valdez (a) Malova, la forma en que manejaron informes superficiales pues solo entregaron el 42% de las actas de entrega-recepción y cómo ocultaron y disfrazaron información de los manejos de miles de millones de pesos, nos recuerda a aquel ilusionista David Copperfield que en sus mejores actos hizo “desaparecer” la Estatua de la Libertad, “pudo” levitar sobre el Gran Cañón y “atravesar” la Gran Muralla China.
Puro ilusionismo el de Copperfield, uno de los mejores, si no el mejor ilusionista del mundo.
Pero aquí en Sinaloa la dupla Malova-Armando Villarreal y compañía hicieron desaparecer cientos, miles de millones de pesos. Y esos si están desaparecidos siendo muy difícil que hagan lo de Copperfield: volverlos a la realidad y hacer que aparezcan en las arcas estatales esas millonarias sumas.
Decía que conocida a medias la verdad porque en realidad el informe presentado por Carlos Ortega Carricarte a los medios de comunicación es parcial pues falta aún ese 58% de actas por revisar para llegar al fondo de la situación y conocer toda la verdad.
Por lo pronto ahí tenemos una deuda pública no de los 4 mil millones que decía Malova, ni menor que la que le dejó Jesús Aguilar Padilla y entregó el hoy Gobernador Quirino Ordaz Coppel, sino de 13 mil 130 millones de pesos, casi el doble que su antecesor…mas lo que se acumule.
El actual Secretario de Administración y Finanzas trató de matizar, como dice mi amigo Jorge Luis Télles su tono lapidario cuando aseguró que Sinaloa no está en quiebra sino “en una situación deficitaria en los presupuestos”.
No hemos dicho jamás que las finanzas de Sinaloa están en quiebra.
Pero si hemos afirmado que hubo saqueo, dilapidación, desviación de recursos tanto federales como estatales etiquetados para rubros específicos a donde no llegaron jamás.
Tantos excesos que hasta dejaron de entregar al SAT impuestos retenidos que fueron aplicados, al igual que recursos provenientes de la federación que venían etiquetados, para satisfacer caprichos tanto personales como de sus amistades en obras suntuarias para satisfacer vanidades de unos cuantos mientras dejaron de realizarse obras y servicios que si eran necesidades imperiosas.
Ahí está la escasez de medicamentos en las instituciones públicas de salud por adeudos millonarios a los proveedores.
Como están las deudas millonarias a otros proveedores y contratistas.
Como está la pésima calidad en algunas obras realizadas que a los pocos días ya estaban inservibles.
Si, es cierto, el gobierno de Quirino Ordaz Coppel está haciendo sacrificios, reduciendo gastos, ajustando algunos cinturones y tocando puertas para bajar apoyos materiales y recursos a fin de operar atendiendo a la población hasta normalizar los servicios, especialmente en salud y educación.
En una serie de actitudes totalmente irresponsables, insisto actuando por caprichos personales o por quedadas de bien, durante el sexenio el gobierno malovista gastó más, mucho más de lo presupuestado en una serie tras otra de decisiones importamadristas.
Solamente en el 2016, el gobierno de Malova gastó 2,225 millones de pesos mas de lo presupuestado.
¿De donde?. De los recursos enviados etiquetados por la federación, lo que constituye un delito grave. Y súmele lo de 2015, 2014, 2013, 2012 y 2011.
Al principio lo pretextos fueron las heladas y otros fenómenos naturales, pero sobre esto se vinieron las decisiones de obras y acciones caprichosas.
Además de los recursos federales Malova y Villarreal se fueron sobre los dineros descontados a los maestros y no entregados al SNTE, el criminal saqueo del fondo del Instituto de Pensiones, además de no pagar a los proveedores.
Ortega Carricarte dio a conocer que de las observaciones de la Auditoría Superior de la Federación a las cuentas públicas de 2011 al 2014, actualmente están en la Secretaría de Transparencia y Rendición de Cuentas 266 procedimientos administrativos. De esas observaciones el 90% del importe corresponde a los sectores de educación, salud e infraestructura, hoy bajo la lupa de la PGR.
Pero además, andan por ahí otros 2 mil 165 millones de pesos que se encuentran en proceso de solventación por los cuales se han iniciado mil 167 Procedimientos Administrativos de Responsabilidad Sancionatoria (PRAS) contra servidores públicos.
Y faltan las observaciones a las cuentas del 2015 al 2016.
Todo esto y mas lo que se acumule justifica plenamente el rechazo del Congreso sinaloense a la cuenta pública estatal del primer semestre del 2016.
Respecto a esas graves anomalías Ortega Carricarte afirmó que a aquellos funcionarios o ex funcionarios que se les detecten irregularidades o malos manejos de los recursos derivado de las revisiones de las diferentes instancias fiscalizadoras, se les va a aplicar estricta y llanamente la Ley.
Y de la cárcel ni Copperfield ni Houdini los saca.
Además, por su lado la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, diputada Irma Tirado Sandoval, ha señalado “Ni vamos a claudicar, ni vamos a juzgar a priori, simple y llanamente se aplicará la ley en atención a nuestras convicciones y a la demanda de la ciudadanía que no tolera más impunidad ni simulaciones”
Y nosotros, por nuestra muy modesta parte le insistimos a Quirino Ordaz Coppel: ¡Que no le tiemble la mano señor Gobernador!