Pep Guardiola, uno de los mejores técnicos mundiales de fútbol, pasa por una crisis de credibilidad y de críticas feroces.

Los sitios de comunicación mundiales especializados en futbol (y de todos los deportes, por cierto) tienen una semana publicando que Guardiola es tan estricto que, varios jugadores no han podido con el ritmo y piden cambios urgentes a los directivos.

En cambio, Guardiola (nuestro conocido cuando estuvo el 2006 con Dorados de Sinaloa) se defiende y menciona que, “cuando intentas meterle tu idea en la cabeza a un jugador, el jugador es muy listo y se da cuenta de que si tienes ilusión, compromiso, exigencia, puedes jugar el famoso tiki-taka que combina habilidades y llena espacios con apasionada inteligencia. No solo con fuerza”.

Esa es la ideología que, no han comprendido, muchos jugadores y que le han costado a las directivas millones y millones de euros especialmente al Barcelona.

Sostiene Pep: “hagan lo que les dé la gana, pero háganlo con decisión”. Esto al referirse a los jugadores y a los asistentes a sus conferencias.
Después de haber dirigido al Barca, por cuatro años y darles más títulos que otro técnico, se retiró un ciclo de 2012 al 2013 y se dedicó a ofrecer conferencias a público selecto que pagaba dos mil euros, o más, tan solo por escucharlo.

Alexander Hieb un bieloruso que llegó firmado por 15 millones de euros con el Barcelona, dijo de Guardiola, “no creo que sea el mejor entrenador del mundo. Entrenó al mejor equipo con los mejores jugadores” .

Hieb estuvo en la banca hasta que pidió su carta de salida, para jamás volver. No soportó el desaire de Guardiola al cual no le gustó el estilo de Alexander y éste no se acopló a su estilo de juego del famoso tiki-taka.

Y es que no es fácil, para ningún jugador, acatar las órdenes de un director técnico como Pep que no juega al futbolito. Juega a ganar o a perder con pasión. Con entrega en la cancha.

Es la mejor figura que ha pisado tierras sinaloenses en el terreno futbolístico. Y se fue contento de su gente, de su gastronomía, de las atenciones recibidas y nunca habló mal de nadie, ni de los temibles mafiosos. No fue amigo ni enemigo de ellos.

De esos hombres y mujeres necesitamos en Sinaloa, que trabajen y sean agradecidos en todos los terrenos, no solo en el fútbol.

LOS INDIOS DE CLEVELAND, RUMBO AL CAMPEONATO DE LAS LIGAS MAYORES
Escribimos esta columna al inicio del segundo juego de la serie mundial de beisbol entre los Cachorros de Chicago y los Indios de Cleveland. El primero lo ganaron los indios con poderío 6-0 y el segundo Chicago 5 por uno.

Las apuestas apuntaban hacia los Cachorros, pero creemos firmemente en que Indios tienen el poder y la magia para romper con el extenso ayuno de no ser campeón.

Aunque la franquicia de Cachorros no gana una corona desde 1908 ufffffff….tulita….eso es mucho.

Nadie les va a regalar el campeonato, deberán ganarlo a base de batazos largos y una buena estrategia. Quizás, en eso, superen a Cleveland. Pero Indios es el equipo que viene de atrás, que responde a la hora oportuna, que las estrellas están en el cielo en el infinito universo y en el estadio están seres humanos que juegan una excelente pelota.

El line up de Chicago luce imponente con Fowler en el jardín central, Bryant en la tercera base, Rizzo en la primera colcheneta, Zobrist en el pardo izquierdo, Báez en la segunda base, Contreras en la receptoría, Russel en las paradas cortas, y Almora como patrullero del prado derecho.

La maldición de la cabra vino del tabernero Billy Sianis, quien en 1945 en la Serie Mundial contra Detroit, llegó al estadio Wrigley con su cabra Murphy por la que pagó boleto, pero no lo dejaron entrar. En ese momento gritó que jamás ganarían una serie mundial. Y se ha cumplido. Hasta la fecha.

Todos en Chicago esperan que se rompa el maleficio y Terry Francona, manager de los Indios trabaja en contrario.