¡Pedro Infante no ha muerto¡¡…Un día como hoy quince de abril, pero de 1957, cuando apenas era un niño de once años, vivía en mi querido Guasave por la calle Benigno Valenzuela. A eso de media mañana, mi mamá Eudosia que, de cariño le decían “Dona Locha” me mandó a comprar masa para hacer tortillas a los abarrotes Lugo que se ubicaba en la esquina de las calles Gabriel Leyva y Norzagaray; por cierto, la tienda era atendida por Doña Bartola, a quien le decíamos “La Tola” …Pero, Hablando Claro, el abarrote, en ese momento estaba lleno de mujeres que compraban no solamente masa para tortillar, sino además otros productos para hacer la comida de medio día. El radio sintonizado en la XEGS, de repente el locutor, no me acuerdo bien si fue Juan Contreras Sarellano o Don Luís Aguilar, quien dijo: “Interrumpimos nuestra transmisión, para darles una lamentable noticia: ¡Pedro Infante ha muerto! Y pues aquello se convirtió en un mar de lágrimas y al ver que el llanto ahogó al bolón de mujeres, yo también solté el llanto… “La Tola”, que no podía contener las lágrimas, logró despacharme dos kilos de masa y me fui por la calle llore y llore, llegué a la casa y mi mamá me preguntó ¿Quién te pegó, por qué lloras? y le contesté sollozando: Nadie me pegó, vengo llorando porque se murió Pedro Infante y a mi madre casi le da un infarto y no podía calmar el lloriqueo junto conmigo…Pedro Infante, si bien es cierto nació en Mazatlán un 18 de noviembre de 1917, y falleció en lamentable accidente aéreo en Mérida, el 15 de abril de 1957 a los 39 años de edad, es hijo adoptivo de Guamúchil y como era medio vago se paseaba por Guasave, donde cultivó amistad sincera con personajes como el empresario Ignacio Bórquez y Roberto Castro; ambos ya fallecidos…La muerte de este gran actor Sinaloense, en aquel momento, causó tal impacto que por la ansiedad y la depresión de la pérdida de su ídolo; el fanatismo, terminó en suicidios, sobre todo de mujeres y hombres que perdieron la razón, por ejemplo “El Tachi Díaz” dueño de una tapicería en Guasave, que luego del fallecimiento de Pedro Infante, que antes de dedicarse a la “Artistiada” fue carpintero, se vestía como como él y agarró la borrachera y en su trabajo ubicado por la calle Madero las 24 horas del día, se escuchaban las canciones del carismático Pedro Infante Cruz, ícono de la época de oro del cine mexicano y una de las voces más representativas de la música popular en México…Hoy 15 de abril de 2023 se cumplen 66 años de que el avión que piloteaba Pedro, cayó, en la calle 54 Sur y 87 en la Blanca Mérida, Yucatán; el lugar exacto donde cayó se encontraba una casa, lo que causó la muerte de una madre y su hijo. Cerca de la zona, se decidió colocar un memorial y un parque en su honor. A 66 años, seguimos escuchando sus canciones y llorando junto con él, escenas de trágico dolor, por eso, Pedro Infante no ha muerto…La frase: “Con ella, no existe pena que desespere, cariño que a mí me quiere con dulce amor; para ella, no existe pena que no consuele; mirándole su carita, yo miro a Dios”; parte de la canción mi cariñito interpretada por Pedro Infante – “Luis Antonio García”- en la película Vuelven los García y se la canta a su abuela Sara García -“Luisa García viuda de García”- como un homenaje al cariño que le profesa. Soy Mario Castro, servidor de usted.